Resumen
El presente ensayo analiza las siguientes obras de Rafael Chirbes (*1949): La larga marcha (1996), La caída de Madrid (2000) y Los viejos amigos (2003), tres ejemplos de la nueva novela histórica española. El análisis se propone, primeramente, describir características centrales de la concepción de las novelas y, segundo, partiendo de tal descripción, determinar la posición de dichas novelas en el campo literario.
El término “experiencia” ayuda a aclarar los siguientes conceptos: La larga marcha y La caída de Madrid ponen claramente de manifiesto que el Estado franquista impidió mediar entre el individuo, sus estructuras mentales y la sociedad, convirtiendo en contradicciones insuperables la satisfacción de las necesidades privadas, la persecución de un objetivo profesional y la lucha por la emancipación política. Los personajes de la tercera novela (Los viejos amigos) que viven en el contexto del posfranquismo y de la democracia renuncian, en cambio, al compromiso político concentrándose en proyectos existenciales privados, propósito éste que, sin embargo, se rompe con frecuencia por la intervención de la contingencia (enfermedad, muerte). Fracaso e incoherencia son, pues, elementos centrales de la concepción de dichas novelas.
Las relaciones intertextuales se pueden resumir diciendo que la posición literaria de las tres novelas de Chirbes primero se opone a una memoria que reprime las divergencias políticas de la historia reciente de España, segundo representa una protesta contra aquella forma de recuerdo que trata de armonizar minimizando y falsificando en realidad la historia de una vida y tercero las tres novelas continúan la tradición de la narrativa nacional e internacional que destaca la crítica al poder y a la alienación.